177 SONETO
Yo te untaré
mis obras con tocino
porque no me las muerdas, Gongorilla,
perro de los ingenios de Castilla,
docto en pullas, cual mozo de camino.
Apenas hombre, sacerdote indino,
que aprendiste sin cristus la cartilla;
chocarrero de Córdoba y Sevilla,
y en la Corte bufón a lo divino.
¿Por qué censuras tú la lengua
griega
siendo sólo rabí de la judía,
cosa que tu nariz aun no lo niega?
No escribas
versos más, por vida mía;
aunque aquesto de escribas se te pega,
por tener de sayón la rebeldía.
|
178 CONTRA EL MISMO (GÓNGORA)
Tantos
años, y tantos todo el día,
menos hombre, más Dios, Góngora
hermano. [juego de naipes]
No altar, garito sí; poco cristiano,
mucho tahúr, no clérigo,
sí arpía.
Alzar, no a Dios:
extraña clerecía.
Misal apenas, naipe
cotidiano;
sacar lengua y barato, viejo y vano, [en los garitos]
son sus misas, no templo y sacristía.
Los que güelen tu musa y tus emplastos,
cuando en canas y arrugas te amortajas,
tal epitafio dan a tu locura:
“Yace aquí el capellán
del rey de bastos,
que en Córdoba nació, murió
en Barajas
y en las Pintas le dieron sepultura”
[juego de cartas]
|